sábado, 1 de mayo de 2021

Un Huracán Anónimo

 Hay muchos nombres para denominar estos monstruosos sistemas meteorológicos o “tormentas” que pululan por nuestro planeta.

Un huracán atlántico o tormenta tropical es un ciclón tropical que se configura y estructura en el Océano Atlántico, primariamente entre los meses de Junio y Noviembre.  Un huracán se diferencia de un ciclón o un tifón solo en función de la ubicación geográfica en la que ocurre.  Un huracán es una tormenta que ocurre en el Océano Atlántico y el Océano Pacífico nororiental, un tifón ocurre en el Océano Pacífico noroccidental y un ciclón ocurre en el Pacífico Sur o el Océano Índico.  ¿Qué cosas, no?

Nota del Autor:

La palabra “ciclón” (o Cyclon en Inglés) viene de la palabra Cíclope en  la mitología griega de acuerdo a los escritos de Hesíodo.  Hesíodo fué un antiguo poeta griego que generalmente se cree que estuvo activo entre el año 750 y el año 650 antes de la Era Común, aproximadamente al mismo tiempo que Homero.

En Hesíodo, los cíclopes eran tres hijos de Urano y Gea, Arges, Brontes y Steropes (Brillante, Tronador, Aligerador), que forjaron los rayos de Zeus. Autores posteriores los hicieron los obreros de Hefesto y dijeron que Apolo los mató por hacer el rayo que mató a su hijo Asclepio. 

Ahora, la palabra inglesa (storm) proviene del proto-germánico “ sturmaz” que significa "ruido, tumulto".  ¿Qué cosas, no? 

La palabra “tormenta” es lo que significa: tormento.  Las tormentas nos atormentan al igual que un siniestro siniestro* nos tortura infamemente. 

Un clima enérgicamente severo en cualquiera de sus varios niveles, es una tormenta en cualquier estado alterado de un medio ambiente o en la atmósfera de un cuerpo astronómico que afecta especialmente a la superficie sobre la que ocurre.  Este fenómeno se señala por interrupciones significativas de las condiciones atmosféricas normales, un cambio tal como fuertes cambios eólicos, tornados, granizo, truenos y relámpagos u otras anomalías eléctricas, severas precipitaciones de varios tipos, lluvia helada intensa o tormentas de poudrines*, céfiros poderosos como un ciclón tropical, o una tormenta de viento; o el viento que transborda alguna sustancia a través de la atmósfera como lo hace una tormenta de polvo, una ventisca, o una tormenta de arena.


Más sobre tormentas

Las tormentas o tempestades no solo acaecen en nuestro vapuleado planeta.  Ellas también ocurren en otros cuerpos planetarios con suficiente atmósfera tales como particularmente pasa en colosos gaseosos.  Estas ocurrencias abarcan huracanes espaciales Geomagnéticos, bengalas o Reconexión Magnética, tormentas Solares, y huracanes siderales de Plasma entre otros.  Estoy seguro de que en “su mundo particular” usted experimenta algunos huracanes doméstico-biomorfológicos de gran envergadura.  Una de estas hercúleas tormentas se llama aterradoramente: La Suegra. 

En Júpiter, la Gran Mancha Roja de este gigante aeriformo* nos brinda un modelo bastante conocido y real de un ciclón o tormenta.  Aunque técnicamente es un anticiclón, con velocidades de viento superiores a las de un huracán, es más grande que la Tierra y ha persistido en su ciclo durante al menos 340 años, habiendo sido observado por primera vez por el astrónomo Galileo Galilei. Neptuno también tenía su propia Gran Mancha Oscura, pero ésta es menos conocida. 

Un anticiclón es un fenómeno meteorológico definido como una circulación a gran escala de vendavales alrededor de una región central de alta presión atmosférica, esto es; en el mismo sentido de las agujas del reloj en el hemisferio Norte, y en sentido anti-horario en el hemisferio Sur.  Los efectos de los anticiclones de superficie incluyen cielos despejados y aire más frío y seco.  ¿Qué cosas, no? 

En Septiembre del año 1994, el telescopio Hubble, utilizando la cámara planetaria de campo amplio 2, grabó imágenes de tormentas en Saturno generadas por corrientes ascendentes de aire más cálido, similar a una tormenta terrestre.  La dilatación Este-Oeste de la tormenta que ocurrió este año emuló el diámetro de la Tierra.  La tormenta se observó a principios de Septiembre de 1990 y se le bautizo como la Tormenta Dragón (Dragon Storm). 

Las tormentas de serrín del planeta Marte varían en sus tamaños, pero muy seguido son capaces de cubrir el planeta completamente.  Estas tormentas de polvo acaecen normalmente cuando Marte está más cerca del Sol, y se ha podido comprobar que estas tormentas aumentan la temperatura global de Marte. 

Hubo una tormenta marciana señaladamente grande que se estudió integralmente y de muy cerca debido a una coincidencia en su sincronización.  Cuando la primera nave espacial (Mariner 9) pudo orbitar con éxito el planeta Marte el 14 de Noviembre de 1971, los científicos astrales se asombraron al descubrir que la atmósfera de Marte estaba colmada de una capa de polvo que cubría todo el planeta.  Esta ha sido la tormenta más grande jamás observada en Marte. 

La superficie de Marte se encontraba completamente nublada por la polvareda.  La computadora del Mariner 9 se reprogramó remotamente desde la Tierra para posponer la captura de imágenes de la superficie de Marte por un par de meses para arle tiempo al polvo a que se asentara, sin embargo; las imágenes oscurecidas captadas de la superficie del planeta contribuyeron considerablemente a la recopilación de datos cientificos de la superficie planetaria y atmosférica de Marte. 

La comunidad científica a descubierto que hay dos planetas extrasolares que sufren de  tormentas.  Estos planetas están denominados como: HD 209458 b y HD 80606 b La tormenta del primero fué descubierta el 23 de Junio de 2010 y su velocidad se midió a 6.200 km/h, mientras que la segunda produce vientos monstruosos de 17,700 kilómetros (11.000 millas) por hora en la superficie del planeta.  La rotación del planeta crea entonces estas tormentas gigantes que empujan el calor hacia lo alto de la tormenta. 

Nota del autor: En un ciclón, la masa de aire cálido asciende, en un anti-ciclón, la masa de aire frío desciende.  Contrario a las leyes de termodinámica, en este caso el aire caliente no desciende.  ¿Qué cosas, no?

 

Estos torbellinos tienen el potencial de quitar dañar vidas destruír  propiedades con sus marejadas ciclónicas, fuertes lluvias o nieve que causan inundaciones o hacen imposible el uso de carreteras, rayos, incendios forestales y cizalladura vertical del viento.  Los sistemas tempestuosos que traen lluvia y son largos en duración contribuyen a aliviar la sequía en los lugares por donde se desplazan.  Por otro lado, las fuertes nevadas pueden permitir la realización de actividades recreativas que de otro modo no serían posibles, tales como esquiar, utilizar motos de nieve, o construír hombres de nieve.

 

Otro pedazo de mitología histórica:

Los Anemoi eran los cuatro dioses del viento en la mitología griega, cada uno de los cuales correspondía a una de las cuatro direcciones cardinales (Norte, Sur, Oeste, Este) de donde procedían.  Eran los hijos de Aeolus, el Guardián de los Vientos, y Eos, la diosa Titán del amanecer.

 

Eolo (Aeolus), el dios de las tormentas, era el líder de los Anemoi y el único miembro que controlaba las cuatro direcciones.  Boreas controló el viento del Norte y trajo el Invierno, Notus controló el viento del Sur y trajo el Otoño.  Zephyrus trajo el viento del Oeste trayendo la Primavera y el comienzo del Verano.  Eurus controlaba el viento del Este.

 

Otro problema

Al estallar la guerra (porque si no lo sabía, ¡las guerras estallan!), la recopilación, correlación y administración del Servicio Meteorológico de Huracanes estaba a cargo de la Oficina Meteorológica de los Estados Unidos.  Esta oficina recibía apoyo de informes meteorológicos, en la medida de lo posible, de las Fuerzas Aéreas del Ejército y la Armada de los Estados Unidos.  Sin embargo, el Servicio Meteorológico de Huracanes se dió cuenta de que había una gran carencia de informes meteorológicos habituales por las severas restricciones en tiempo de guerra.

 

Esto era debido al silencio radial en los barcos y con los convoyes de barcos navegando al azar en rutas secretas, y entonces privaban a los peritos de los informes meteorológicos en vastas regiones áreas oceánicas que normalmente se obtenían de buques mercantes y otras fuentes marítimas.

 

La ausencia de estos informes de los barcos en el mar había dejado vastas extensiones de océano sin informar donde las tormentas destructivas podrían formarse fácilmente y alcanzar proporciones sumamente peligrosas.  Por lo tanto, las demandas y restricciones en tiempo de guerra actuaban contra los datos aerológicos precisos sobre estas vastas extensiones oceánicas, creando un problema de grandes proporciones para las Fuerzas Armadas y la Oficina Meteorológica de los Estados Unidos. El Comité Meteorológico Conjunto, un subcomité de trabajo del Estado Mayor Conjunto, tuvo que actuar en este problema.

 

No más historia ni ensalada informativa: vamos al grano como dijo el cirujano.

El Huracán Anónimo

Durante el ajetreado mes de Agosto de 1893; se produjeron eventos ecuménicos sensacionales tales como cuando Henry Perky y William Ford patentaron el trigo triturado, también se convocó el 53 ° Congreso de los E.E.U.U., se publicó la primera revista de Bowling en Nueva York, y los ciudadanos chinos fueron deportados de la ciudad de San Francisco en virtud de la Ley de Exclusión. 

Francia comenzó emitiendo sus primeros permisos de conducir e introduciendo el registro de vehículos motorizados, los Estados Unidos dejaron de tener derechos exclusivos de entrada al mar y estrecho de Bering, la Shechita, un ritual judío de sacrificio de mamíferos y aves, se prohibió permanentemente en Suiza, un gran tornado destruyó las costas de Savannah y Charleston en el Estado de Georgia acarreando más de 1.000 muertes, y en la 13ª Final de tenis masculino de E.E.U.U., Robert D. Wrenn derrotó a Fred H. Hovey en un emocionante partido.  Hum... ¿pero a quién le importa esto? 

Mentí un poco (solo un poquito) al decir “No más historia ni ensalada informativa”, pero bueno; a los viejos a veces se nos olvida lo que decimos. 

Mientras este loco año (1893) se desenvolvía laborioso y frenético a través de la historia, en la costa Este de los Estados Unidos un huracán anónimo, el que apareció  súbito y mortal demandando 34 vidas como carta de presentación, tuvo un impacto directo y demoledor en La Gran Manzana (Nueva York).  No sé por qué le llaman La Gran Manzana a Nueva York, ¿será porque está infectada y supurada con gusanos desagradables?  Debería llamársele “La Gran Gusanera”.  Digo yo...  basado en varias experiencias, incluyendo la del buque manicero... 

El augurioso día del 24 de Agosto de 1893, este ciclón tropical catastrófico y devastador el que fué anterior y originalmente identificado como una tormenta tropical el día 15 de Agosto en el Océano Atlántico central; flageló la triste ciudad de Nueva York sin ninguna notificación.  El huracán se desplazó furtiva y rápidamente hacia el noroeste desde el océano Atlántico, y alcanzando ráfagas máximas sostenidas de aproximadamente 200 kph, se dejó caer de súbito sobre los descuidados y despistados neoyorquinos, aporreando primero la zona Oeste de Long Island.  Subsecuentemente; la tormenta fué bautizada sin gloria ni encanto como el "Huracán de Nueva York". 

Esta diabólica tormenta merecedora de un apodo de suegra, desplegó formidables mareas hacia tierra de hasta 10 metros de envergadura, batiendo impunemente la costa de Nueva York e infligiendo daños severos y extensos a diestra y siniestra.  Se derribaron árboles, se perturbaron vidas, se demolieron casas, los servicios de emergencia no estaban preparados para tal sorpresa y fallaron descorazonadamente.  Las islas Hog, un conjunto de dos islitas frente a Long Island ubicadas frente a la costa sur de Rockaway (una península en el distrito de Long Island), fueron demolidas por el irascible ciclón.  Este es el único episodio conocido en la historia en el que un huracán arrasó con una isla entera.

 

Microseísmos*

En sismología, un microsismo se define como un leve temblor de tierra causado por fenómenos naturales.  A veces denominado "zumbido", no debe confundirse con el fenómeno acústico anómalo del mismo nombre.  El término se usa más comúnmente para referirse a las señales de ruido sísmico y electromagnético de fondo dominantes en la Tierra, que son causadas por ondas de agua en los océanos y lagos.  Esta información apoya el pronóstico del tiempo, especialmente en los océanos. 

Al estallar la guerra, la recopilación, correlación y administración del Servicio Meteorológico de Huracanes estaba en manos de la Oficina Meteorológica de los Estados Unidos, con la ayuda de los informes meteorológicos, en la medida de lo posible, de las Fuerzas Aéreas del Ejército y la Marina de los Estados Unidos.  Sin embargo, el Servicio Meteorológico de Huracanes carecía adalpelágicamente la falta de informes meteorológicos diarios por las restricciones en tiempo de guerra, incluyendo el silencio de radio en los barcos y con los convoyes navegando al azar sobre el océano, habían privado a los meteorólogos de los informes meteorológicos en estas vastas regiones marítimas, información meteorológica de estas áreas oceánicas que normalmente se obtenían de buques mercantes y otras fuentes navales. 

La ausencia de estos informes de los barcos en el mar había dejado vastas extensiones de océano sin informar donde las tormentas destructivas podrían plasmarse fácilmente y alcanzar proporciones alarmantes.  Por lo tanto, las demandas en tiempo de guerra por datos aerológicos precisos sobre estas vastas extensiones, crearon un problema de grandes magnitudes para las Fuerzas Armadas y la Oficina Meteorológica de los Estados Unidos.  Entonces, el Comité Meteorológico Conjunto, un subcomité de trabajo del Estado Mayor Conjunto, consideró el problema para analizarlo y obtener una solución. 

Y este completo escrito fué solo para comentarle acerca la mayúscula cagada que quedó en Nueva York en 1893 causada por estos vientitos y brisitas encolerizadas a los cuales, algunas personas más específicas y con lengua de lija para habar, les llaman: peos del infierno. 

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Et sub Glossarium Glossarium – (Cum amore legentibus)

 

Aeriform: De la forma o forma de gas; gaseoso.

Microseísmo: Pequeños temblores detectables sólo por sismógrafos.

Poudrín: Pequeños cristales de hielo.

Siniestro: Esta palabra no está repetida en el escrito.  La voz “siniestro” también significa: incendio.  Entonces un siniestro siniestro es un incendio siniestro. 

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Post scriptum et quorumdam suggestionibus pro futurum:

Si hay algún tema sobre el cual usted quisiera leer mis traumáticas y ligeramente psicopatísticas opiniones, por favor sugiéralo a: rguajardo@rguajardo.us. 

Caveat: Mis opiniones personales pueden resultarle ácidas, demasiado honestas, corrosivas, irreverentes, insultantes, altamente irónicas, acerbas, licenciosas, mordaces y de una causticidad filosófica sin límites conocidos por el ser humano, y quizá no le apetezcan o acomoden intelectualmente; pero es lo que habrá disponible basado en su pedido.  Gracias.   

The Sincipitus Porcus 

El Loco